¿Cómo funciona una electroválvula?



Las electroválvulas son dispositivos electromecánicos diseñados para controlar de lleno el flujo de líquidos y de gas, dichos dispositivos son muy demandados en la actualidad, y por ello es por lo que nosotros decidimos realizar este post, con la finalidad de hablarles un poco sobre estos dispositivos tan útiles.

 

¿Qué es una electroválvula?

 

Para los que no lo saben del todo, una electroválvula viene siendo nada más y nada menos que una válvula electromecánica empleada justamente para poder controlar de lleno o como se desee el caudal de un líquido o en su defecto de un gas. Al día de hoy existen diferentes tipos de electroválvulas, y en este punto cabe mencionar que generalmente las variantes más importantes de estas resultan ser las electroválvulas servoasistidas y las de acción directa, las válvulas servoasistidas son las más utilizadas, dado el hecho de que emplean la presión de línea del sistema para lograr así abrir y cerrar el orificio principal del cuerpo de la válvula en sí.

 

Mientras que en el caso de las electroválvulas de acción directa estas son entonces las que abren o cierran de forma directa el orificio del cuerpo de válvula, el cual representa la única trayectoria de caudal en el interior de la válvula, este tipo de electroválvula se suele emplear directamente en sistemas que requieren realmente muy bajas capacidades de caudal o simplemente en aplicaciones con baja presión diferencial por medio del orificio de la válvula.

 

¿Cómo funcionan las electroválvulas?

 

Quizás muchos de ustedes aún no lo saben, pero las electroválvulas suelen funcionar correctamente controlando el caudal de los líquidos o de los gases en modo positivo, totalmente cerrado o en su defecto totalmente abierto. A menudo este tipo de dispositivo se utiliza para sustituir por completo las válvulas manuales o directamente para lograr controlarlas de manera remota, además tengan en cuenta que el funcionamiento de una electroválvula implica de cierta forma la apertura o el cierre del orificio del cuerpo de la válvula, logrando así que exista o que se evite al máximo un flujo por medio de dicha válvula. En este caso un émbolo se encarga de abrir o cerrar el orificio elevándose o descendiendo, justamente por dentro de un manguito tubular, al lograr energizar por completo la bobina con una corriente eléctrica

 

Como pueden darse cuenta las electroválvulas están entonces formadas justamente por un conjunto que consta directamente de una bobina, de un émbolo y asimismo de un tubo guía.

 

Para que entiendan un poco mejor cómo funcionan estas, les podemos poner como ejemplo las válvulas normalmente cerradas, en este caso un muelle de retorno es el que mantiene el émbolo presionado contra el orificio, así que de este modo se impide por completo el paso de caudal. Además, cuando se energiza la bobina de solenoide, es cuando el campo magnético resultante de forma inmediata hace elevarse el émbolo, permitiendo de esta manera el paso de caudal y cuando se energiza la bobina en una válvula totalmente abierta, el émbolo opta por sellar rápidamente el orificio, el cual claramente impide el flujo de líquido o de gas.


Compartir en facebook twitter Google tumblr pinterest

Entradas similares

0 Comentarios